Las elecciones municipales, regionales y generales del 2011 ya están casi a la vuelta de la esquina y los partidos y movimientos políticos están despertando de su letargo. No faltan “empresarios” de la política que, al darse cuenta de lo rentable del “negocio” están formando sus movimientos y se les ve por ahí canjeando firmas por politos y lapiceros. Algunos lo hacen con fines de llegar al poder y “manejar” las arcas municipales y regionales – muy jugosas, sobre todo en Ancash – y otros, muy pocos, con la finalidad de ejecutar sus nobles motivaciones principistas a favor del pueblo. Es en ese contexto que el escenario nacional y regional se está configurando. Las encuestas destacan los nombres de Castañeda, Toledo, Humala, Flores, etc. como presidenciables; pero son los candidatos centralistas o limeños. En las regiones por el contrario se gestan nuevos liderazgos, más poderosos en principios y convicción que los limeños. En el caso del norte del Perú: Ancash, La Libertad, Lambayeque, Cajamarca, Piura, Tumbes, Iquitos se gestaron dos movimientos o partidos pan regionalistas: El Partido Humanista, liderado por Jehude Simos y el Partido Alianza por el Progreso, liderado por César Acuña. Se vislumbra una gran batalla por lograr la aceptación entre estos dos nuevos partidos y los partidos “tradicionales”.
Jehude Simons, por su pasado político de apego a las masas tenía un gran futuro electoral hasta el día en que se hizo Primer Ministro de Alan García porque de alguna manera se aleja del pueblo y asume parte de sus pasivos, sobre todo con las grandes “franeleadas” que le da últimamente. Por el contrario, al haber mantenido firme su línea política y su convicción César Acuña le ha dado soporte y respaldo moral a su partido Alianza por el Progreso y además se ha ganado el respaldo de las masas. De mantener el ritmo es muy seguro que APP se convierta en el partido pan regionalista más importante del Perú porque está dos pasos delante de su competidor más cercano y se ha posicionado en la percepción ciudadana como un partido triunfador, donde llegan personas de todas las tiendas políticas, algunos inclusive con cargos dirigenciales en otros partidos.
Eso explica el porqué muchos políticos de la región como Vera Arana, Vladimir Meza, Edward Vizcarra, Waldo Rios, Ildefonso Espinoza, Eliazar Vertiz, Pedro Carranza entre otros se hayan reunido con Acuña Peralta a tomar un “café” al punto que lo han cambiado de color; y también porque mucha gente colma los locales de Alianza por el Progreso. Y todos llegan y están deseosos de asumir los cargos dirigenciales. Pero eso genera también un peligro. Como se sabe, toda masa deseosa de acceder al poder partidario crea conflictos internos los mismos que si no corrigen a tiempo generan la autodestrucción del mismo. Y ese es el caso de APP en Ancash. Por eso no es de extrañar que los primeros conflictos internos se hayan desatado al interior por tomar la dirigencia regional.
César Acuña debe separar la paja del trigo y encomendar en Ancash la conducción de su partido a gente capaz, eficaz y respetable. APP está creciendo, es una opción electoral – como otros partidos - para el norte peruano y de la forma en cómo maneje y solucione sus conflictos internos, diseñe su estrategia política y se comunique con el pueblo depende su éxito electoral; caso contrario, el polvo de la derrota y el llanto de sus oportunistas será su único consuelo.
César Acuña debe separar la paja del trigo y encomendar en Ancash la conducción de su partido a gente capaz, eficaz y respetable. APP está creciendo, es una opción electoral – como otros partidos - para el norte peruano y de la forma en cómo maneje y solucione sus conflictos internos, diseñe su estrategia política y se comunique con el pueblo depende su éxito electoral; caso contrario, el polvo de la derrota y el llanto de sus oportunistas será su único consuelo.
